“Recientemente se visitaron 20 institutos forenses para verificar si los problemas identificados en 2020 fueron subsanados, lamentablemente, se evidenció que no hubo mejoras sustanciales en estas reparticiones, se identificó casos, por ejemplo, en los que no cuentan con equipamiento para investigación de delitos sexuales”, manifestó la Defensora del Pueblo, Nadia Cruz.
En abril de este año, a fin de verificar el cumplimiento de sus recomendaciones contenidas en el informe “Los Institutos de Investigación Forense no garantizan el acceso a la justicia”, relacionadas a las mejoras de las deficiencias identificadas hace dos años, la Defensoría del Pueblo visitó 20 reparticiones del IDIF en La Paz, El Alto, Oruro, Potosí, Cochabamba, Sucre, Tarija, Santa Cruz, Pando, Caranavi, Tupiza, Villazón, , Puerto Villarroel, Villa Tunari, Bermejo, Yacuiba, La Guardia, Montero Guayaramerín y Riberalta.
En general, dijo Cruz, estas oficinas carecen de equipamiento suficiente o necesario, por ejemplo, se observó que 15 no cuentan con equipos de rayos X, en 12 no disponen de colposcopio taburete de auscultación, en 12 carecen de equipamiento para el laboratorio, en 12 no disponen de Luz de Wood (para investigación científica de delitos sexuales), en 11 no tienen luces forenses, en 10 carecen de amoladora eléctrica.
La verificación defensorial también identificó que en 12 oficinas del IDIF falta de material biológico para muestras de semen en PCA; seis oficinas carecen de sierras eléctricas, cuchillos y estiletes; en cinco no tiene cuchillos; y en seis no existen estiletes, en siete no disponen de ácido prostático específico para delitos sexuales; y en tres no tienen insumos de bioseguridad.
Estas falencias afectan la investigación científica de los casos de delitos sexuales, que cuyas cifras son alarmantes, tal como se evidencian en los registros de la Fiscalía General, que señalan que en 2021 las denuncias sumaron 8.513. Datos hechos públicos por la Fiscalía Especializada en Delitos en Razón de Género y Juvenil, hasta el 9 de mayo de este año estos delitos sumarían 3.481 por violación sexual, abuso sexual, violación a niñas, niños y adolescentes y estupro.
Otra deficiencia identificada está relacionada al personal especializado. En 18 oficinas indicaron que no cuentan con personal especializado o médicos forenses; 11 señalaron la ausencia de especialistas en toxicología forense y biología forense; ocho que carecen de biólogos forenses y en ocho les faltan médicos forenses.
En cuanto a infraestructura, se constató que, de las 20 oficinas verificadas, 13 carecen de baños en los consultorios; 10 no disponen de salas de recepción; 12 no cuentan con laboratorios de toxicología; nueve carecen de un ambiente para la custodia de evidencia; y siete no cuentan con un espacio para guardar muestras y los archivos correspondientes.
“De acuerdo a los resultados obtenidos, como se evidencia en los detalles brindados, aún persisten las necesidades en la mayoría de las oficinas del IDIF, la mayoría no cuenta con los ambientes suficientes o requieren refacciones o mejoras por las condiciones en las que se encuentran; es preocupante la falta de laboratorios toxicológicos, importante en el análisis de drogas de abuso, alcohol y medicamentos psicotrópicos; esta carencia devela deficiencia de los IDIF en la prestación de estos estudios”, manifestó la Defensora.
La Defensoría del Pueblo, entre 2019 y al 30 de abril de 2022 registró 46 denuncias en contra del IDIF, referidas a violencia física hacia mujeres, restricción al acceso la justicia, incumplimiento de plazos en procesos judiciales, administrativos, disciplinarios, otros, atención a víctimas de violencia, debido proceso y otros.
La Defensora Cruz, el 11 de mayo, remitió una nota al Fiscal General del Estado, Juan Lanchipa, solicitando que instruya la adopción de acciones efectivas para dotar las instalaciones adecuadas al IDIF a nivel nacional, fortalecer con recursos humanos en cuanto a médicos forenses y personal especializado, dotar de instrumentos, equipamiento e insumos necesarios en estas reparticiones forenses.