Un intento de fuga que tuvo lugar durante la pasada noche en la cárcel de Tuluá, en el departamento colombiano del Valle del Cauca, ha dejado hasta el momento un saldo de 49 muertos y 30 heridos, después de que los reclusos provocaran un grave incendio durante el transcurso de un motín.
La emergencia pudo ser controlada alrededor de las 02.00 de la madrugada de este martes, mientras que el cuerpo de bomberos logró dominar las llamas.
Según Tito Castellanos, director del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC), el grave incidente comenzó cuando se intentó controlar el intento de fuga en el pabellón 8, que alberga a cerca de 200 reclusos, como confirmó al medio La W.
Los presos prendieron fuego a sus colchones, que acabó descontrolado, mientras que comenzó una trifulca relacionada con el control territorial de ese pabellón. Los fallecidos fueron producto tanto del fuego como de la pelea desatada, mientras que entre los heridos se encuentran también funcionarios de prisiones.
Castellano ha alabado la labor de los guarias del INPEC: «El personal que estaba en ese pabellón logró sacar a la mitad de los reclusos o si no la cifra sería más alta», relató a la emisora.
El presidente de Colombia, Iván Duque, ha lamentado los hechos ocurridos en el recinto penitenciario y ha informado de que ha dado instrucciones para adelantar investigaciones al objeto de esclarecer los hechos. «Mi solidaridad con las familias de las víctimas», ha concluido su mensaje en Twitter.