El presidente del Estado, Luis Arce Catacora, posesionó la noche de este viernes, de manera interina, al nuevo Alto Mando Policial, conformado por el general Orlando Ponce, como Comandante General; Álvaro JoséÁlvarez, como Subcomandante y jefe de Estado Mayor y Augusto Sandoval, como Inspector General de la Policía.
Durante el acto de posesión, realizado en la Casa Grande del Pueblo, el jefe de Estado remarcó que la Revolución Democrática y Cultural encaró transformaciones muy importantes en la Policía Boliviana, orientadas a acercar a la institución verde olivo a su pueblo.
Destacó que después de 37 años de vida democrática, el año 2019 se produjo una ruptura del orden constitucional, así como también una ruptura en la relación pueblo y Policía Boliviana, pero tras haber recuperado la democracia, gracias a la unidad, lucha y conciencia del pueblo boliviano el país se encuentra en un proceso de reconstrucción de la confianza con la institución policial, recociendo su rol en el camino de la reconstrucción de la patria, en la senda de estabilidad, certidumbre y esperanza para el pueblo boliviano.
“Nos encontramos ante la urgente necesidad de encarar transformaciones estructurales, cambios orientados a fortalecer la relación con el pueblo y promover la excelencia en el servicio que prestar en el marco de la seguridad interna del Estado, a reforzar y destacar el buen trabajo que se realiza por la mayoría de sus miembros, el cual no es reconocido por grupos de la derecha, salvo cuando toca las puertas de la institución para atentar contra la democracia”, sostuvo Arce Catacora.
En ese marco, expresó que se debe trabajar mucho más para desterrar las prácticas que tanto daño hacen a la Policía Boliviana y ser plenamente conscientes que por culpa de algunos malos elementos se va deteriorando la confianza del pueblo hacia la institución.
Destacó que la transformación de la Policía debe encararse no solo desde el ámbito de cambio normativo, sino institucional articulado a la generación de una conducta ejemplar, cimentada en los principios y valores establecidos en la Constitución Política del Estado.
“Estamos conscientes que los efectivos policiales deben enfrentar poderes extremadamente grandes y peligrosos, muchas veces muy bien armados, que utilizan entre otras armas la corrupción para neutralizar el accionar en contra de su actividad ilícita y que, en algunos malos jefes policiales, encandilados por el dinero fácil y enriquecimiento rápido, han sido cooptados por bandas delincuenciales que operaron en nuestro país”, dijo.
A decir del Presidente, desde la recuperación de la democracia hay importantes avances en la lucha contra la actividades delictivas, en ese sentido destacó el trabajo realizado por el general Jhonny Aguilera, como Comandante General de la Policía Boliviana, en este proceso de la reconstrucción de la confianza entre la Policía y el pueblo boliviano.
“Hoy asume el general Ponce para profundizar estos avances, rectificar los errores y fortaleciendo la lucha contra el delito. La lucha frontal contra la delincuencia es importante, y sin proteger a nadie es la mejor manera de lograr que el pueblo boliviano recupere la confianza en la Policía Boliviana. Hoy tenemos importantes retos, encarar una profunda transformación y recuperar la institucionalidad”, aseveró el Presidente.
Por su parte, el nuevo Comandante General de la Policía, agradeció por la confianza depositada en su persona para dirigir los destinos de la Policía Boliviana y comprometió un trabajo eficaz para transformar y recuperar la confianza de la institución.
“Conocido el difícil momento por el que atravesamos, mi persona se compromete a trabajar desde este preciso momento para el eficaz cumplimiento de la ley, brindando todo mi profesionalismo y mayor esfuerzo al servicio de los intereses de la patria boliviana”, dijo.