Guadalupe, la festividad que conserva la cultura de los ayllus

La localidad se encuentra a 76 kilómetros de la ciudad de Potosí. Jóvenes de varios ayllus se acercan en grupo a la plaza para interpretar instrumentos de viento como el ‘wauku’, mientras que las mujeres entonan cánticos con voces agudas.

Pueblo de clima templado, con curiosos trazos pintorescos y enclavado en las laderas de los ríos Jatun Mayu, Maycocha y Campana Wayq’u, ahí se halla la capital de la provincia Tomás Frías del departamento de Potosí.  Tinguipaya es un municipio cuyo modelo de organización social y territorial predominante es el ayllu. El uso de su vestimenta originaria es tan importante que hombres y mujeres confeccionan sus prendas de vestir que se caracterizan porque sus textiles son parte de la identidad cultural de sus habitantes.

De forma tradicional el 8 de septiembre, de cada año, los ayllus que conforman el municipio de Tinguipaya se aprestan a celebrar la fiesta de la Virgen de Guadalupe. La localidad se encuentra a 76 kilómetros de la ciudad de Potosí, la festividad denota elementos particulares, los pobladores de los siete ayllus arriban al lugar para mostrar sus mejores galas junto a sus instrumentos musicales ancestrales ‘waukus’ y charangos.

La fiesta de la Virgen de Guadalupe

La plaza principal de Tinguipaya empieza a llenarse, todos visten elegantes, en uno de los grupos destaca la figura del antropólogo belga-boliviano Vincent Nicolas, un investigador que conoce la organización de los ayllus de ese municipio. Jóvenes de varios ayllus se acercan en conjunto a la plaza para interpretar instrumentos de viento como el ‘wauku’, mientras que las mujeres entonan cánticos con voces agudas y sobresalientes. Nicolas mencionó que las tropas de músicos vienen de distintos ayllus como Ilchaco, Mañu, Jahuacaya, Q’ollana, Urinsaya, Q’ollana Inari, Sullcaynari, Q’anasa y Q’aña, que llegan cargando “sus vírgenes” (imágenes de la Virgen de Guadalupe).

Los pobladores de Jahuacaya llevan en alto la “Bandera del Niño” o “Niño Bandera”, como dicen ellos, que destaca por sus colores blanco celeste y blanco (aunque el blanco más parece tener una tonalidad rosa muy baja), es posible que esa bandera sea una reminiscencia a aquella bandera que usó el general Manuel Belgrano en 1813 en la Batalla de Ayohuma, en el norte del departamento, destaca Nicolas. Es parecido a uno de los dos emblemas de Macha llamado de esa forma tras haber sido hallado en la Capilla de Titiri, municipio de San Pedro de Macha en 1883 por el sacerdote Martín Castro.

Todos están muy bien uniformados tanto hombres como mujeres, esperan el momento de la procesión de la virgen. Al mediodía, el párroco del templo Nuestra Señora de Belén de Tinguipaya encabeza la romería, por atrás lo acompañan varias orquestas de ‘waukus’ en un baile llamado la rueda. Vincent Nicolas alega que el templo tiene como patrona a la Virgen Nuestra Señora de Belén; sin embargo, los siete ayllus destacan como fiesta mayor a la Virgen de Guadalupe; los ayllus cuentan con la imagen de una virgen, cada una tiene su historia, su aparición y además un relato de cómo llegó a la comunidad, comenta el entrevistado.

A las afueras del pueblo, centenares de vehículos arribaron con ingentes cantidades de personas, muchos jóvenes bailan por las calles de Tinguipaya acompañados de sus charangos, bien vestidos con su atuendo típico, resaltan las figuras decorativas que se plasman en sus bordados, un ligero correteo se aprecia mientras estos grupos visitan las chicherías, en sí la chicha es la bebida más apetecida por los residentes, además de ser dulce y muy apreciada.

La fiesta no termina ahí, al día siguiente los ayllus retornan a sus comunidades para concluir la fiesta. Según Nicolas, en algunos lugares suelen festejar la fiesta de la miniatura Alasita, con lo que se termina la fiesta en honor a la Virgen de Guadalupe.

El templo patrimonial

El Templo Nuestra Señora de Belén es una edificación de fines de 1562, está ubicado en la cabecera de valle de Tinguipaya y fue construido a base de piedra, ladrillo y adobe. En su interior se encuentran varios lienzos, el más importante es la ‘Vía Crucis de Cristo’ (1878), cuenta con cuatro altares, un púlpito de estilo barroco mestizo cubiertos con lámina de pan de oro al igual que el imponente retablo mayor y la portada clásica compuesta de pilastras adosadas a la pared.

El templo fue declarado como Monumento Nacional el 19 de septiembre de 1945 y es Patrimonio Cultural Material de Departamento de Potosí, por Ley Departamental 117/2019.

Tinguipaya se ubica a 76 kilómetros de la ciudad de Potosí y se puede llegar a través de la carretera hacia Oruro, el tramo está asfaltado, es una población ideal para pasear y recorrer las calles de la localidad.

(*) Es socio de número de la Sociedad de Investigación Histórica de Potosí – SIHP.

(**) Es docente universitario de la Universidad Autónoma Tomás Frías – UATF.

Tambíen te puede interesar