Arturo Murillo, exministro de Gobierno durante la gestión de Jeanine Áñez y autor intelectual de las masacres de Senkata y Sacaba, ofreció al Gobierno boliviano entregarse a la justicia del país. La propuesta la realizó mediante una carta remitida al a su ficha en españa Alejandro Entrambasaguas editor en el periodico de extrema derecha OK Diario donde fue replicado este miércoles.
“El MAS busca eliminar a la ex presidenta Áñez”, afirma el exministro en la carta publicada en su integridad en el mencionado medio. Ante esta situación, Murillo lanza una “propuesta firme y contundente” al Gobierno.
“Acepto una extradición al país si el presidente Luis Arce concede arresto domiciliario a la ex presidenta Áñez”. Es la primera parte de una propuesta que facilitaría el retorno de Murillo y su procesamiento por la justicia boliviana. Sobre la exautoridad pesan diversas denuncias por la compra de gases lacrimógenos con sobreprecio y por la cual se encuentra recluido en EE.UU.
En la segunda parte de la propuesta, el exministro condiciona su extradición a la presentación de “una carta al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, en la que remita la entrega del coronel Maximiliano Dávila, investigado por el Departamento de Estado de EEUU por narcotráfico en un intercambio de prisioneros”.
Murillo es considerado como la mano derecha del Gobierno de Jeanine Áñez. También recaen sobre él las órdenes que desembocaron en la actuación de fuerzas armadas durante los conflictos de Senkata y Sacaba. Una veintena de personas (18 según el informe de la GIEI) fallecieron a consecuencia de los disparos realizados por el Ejército.
Al inicio de la carta, Murillo cuestiona la actitud de “muchos excolegas, senadores y jefes de partidos políticos” quienes “no están dando la cara”. En concreto, el exministro lamenta la ausencia de testigos de descargo en el juicio que afronta Áñez por resoluciones contrarias a la Constitución.
Para Murillo, el juicio en contra de la expresidenta es “absolutamente ilegal e inconstitucional”. Califica el mismo como “farsa” e involucra en el mismo, además de a otros exministros, a “integrantes del MAS como Adriana Salvatierra y Susana Rivero entre otras personas, no están dando la cara”.
Antes de replicar los difíciles circunstancias en las que se realizó la transición y la gestión de Áñez, recalca que la exmandataria “tuvo la valentía de asumir el rol que la historia le dio, se salvaron miles de vidas en Bolivia”.
Murillo se encuentra detenido en Florida, Estados Unidos, por un proceso de legitimación de ganancias ilícitas y blanqueo de dinero. Desde mayo del pasado año aguarda un juicio que está previsto para noviembre de este año.
La carta publicada por OK Diario refiere la difícil situación que vivió el país desde la renuncia de Evo Morales y Álvaro García Linera hasta las acuerdos alcanzados con los movimientos sociales para viabilizar una transición. En esos días, Murillo cuenta que debió realizar una operación especial para rescatar a su familia oculta en la selva del Chapare por ocho días. Con información de El Deber.