Por: Arturo Aliaga Alcaraz.
Apelamos al dicho popular: “Ni que ocho cuartos”, cómo
expresión para negar y rechazar rotundamente lo dicho, sobre imaginaria ilusión política de separatismo oligárquico cruceño de la nación camba, bajo la blasfemas, injuriosa y ultrajantes expresiones de afrenta a la patria bajo las agoreras formas de república independiente de Santa Cruz. La mestiza oligarquía cruceña, no tiene existencia ni pre colonial ni republicana.
En 1.809, los hijos de los hacendados cruceños, estaban ocupados de aprender el oficio paterno de, acumular plata con trabajo indígena y no hubo tiempo para acudir a las aulas del conocimiento en Charcas La Plata, menos formación ideológica y política para armar un cabildo, siendo su oficio reunir vacas y no reunir, gentes, por lo qué, el artesanal charke o chalona fue el principal negocio en los entonces mercados de Potosí y La Plata. Salvo destellos de valor del argentino, Ignacio Warnes, cómo consecuencia de las expediciones militares rioplatenses, después de 1.816, no hubo aporte ni político menos militar tampoco compromiso cruceño en la constitución y fundación de la patria.
La guerra del Chaco, la aguantaron más aymaras, quechuas, guaraníes y otros, cuándo la oligarquía cruceña en 1932, no tenía aún existencia económica y política, por ello jurídica, politica y teritorialmente, la patria y sus recursos naturales del chaco boliviano, son propiedad de la patria y no de las logias cruceñas, separatistas y federalistas, servio croatas. Las logias racistas cruceñas, son hijas del MNR, y nace cómo consecuencia de del Plan Bohan, qué el Estado de 1952, estructuró para el desarrollo de Santa Cruz, con fabulosas inversiones del Estado boliviano en Santa Cruz. ¿Dicen qué Santa Cruz, núnca hubiera vsido boliviana?.
La primera acción político militar, territorial del entonces Mariscal Antonio José de Sucre, desde el naciente Estado republicanos de Bolivia, y la capital Charcas La, Plata, fue defender moxos y chiquitos de la ocupacion militar brasilera, con fines de anexión a la monarquía al imperio portugués. Bolivia, nace con Santa Cruz dentro con Moxos, Chiquitos, chaco, llanos y amazonía y otros, qué en el período colonial, fuera de producir “charque”, para Potosí y
La Plata, expresan residuos territoriales pobres en ese tiempo, en recursos naturales y cuándo la avidez del Estado colonial estaba centrado en la plata potosina, es la iglesia católica y los jesuitas cómo brazo ideológico y político del Estado colonial español qué se ocupan de la mal llamada, cristianización de pueblos indígenas del chaco, llanos y amazonía.
No vengan ahora el racismo federalista con la cantaleta de que, Santa Cruz no fue parte de Bolivia desde su fundación, cuándo, Santa puej, nació con Bolivia, fue recuperada de la invasión portuguesa, y defendida de las pretensiones pan territoriales del Paraguay en la guerra del chaco por los bolivianos qué ofrendaron más de 50 mil vidas, y que finalmente recuerde la oligarquía cruceña que Santa Cruz, es hija predilecta del Estado de 1953 y que las dictaduras militares del 70, repartieron tierras a diestra y siniestra a los gamonales movimientistas cruceños.
Si de alguién es Santa Cruz, es de los pueblos indígenas de chaco, llanos y amazonía y no de esa lacra ideológica política separatista y racista denominada hoy, oligarquía cruceña, servio – croata. El qué quiere irse de Bolivia, qué se vaya, porqué, cantado o silvado, por las buenas o las malas, el territorio y los reursos naturales apetecidos por la nación camba, sí o sí, se queda con Bolivia y dentro del Estado Plurinacional de Bolivia y sus pueblos indígenas, dueños ancestrales de su territorio.
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