No le importó la presencia de perros en el patio, su instinto de supervivencia lo llevó a buscar comida en una de las casas ubicada cerca del cerro. Tras que la dueña del lugar lo vio —a pesar de que está más flaco— no tuvo la mínima duda de que era Vampiro, el gato que había sido abandonado en plena carretera por el chofer de un bus, hace casi dos meses.
María (nombre ficticio) le dio comida y agua durante dos días, luego, con ayuda de sus hijas logró agarrarlo y retenerlo en una habitación. Uno de los tantos carteles de búsqueda con la foto de Vampiro, colocados por los alrededores de Llavini, fue clave para poder tomar contacto telefónico y dar la buena noticia.
“Hemos encontrado a su gatito, le mandaremos una foto para que nos confirme si es Vampiro”, dijo la señora. En el instante que Jhamel vio la imagen su corazón latió más fuerte y las lágrimas de alegría comenzaron a brotar de sus ojos. Sí, era él, su gato perdido, la mascota que forma parte de su familia hace siete años.
Inmediatamente tomó contacto con algunos familiares y amigos para pedirles que vayan a buscarlo hasta Llavini, a 68 kilómetros de la ciudad de Cochabamba. Lamentablemente, ella no podía hacerlo ya que tuvo que retornar a Santiago de Chile -después de buscar incesantemente durante dos semanas a su gato-, ciudad donde actualmente trabaja y estudia.
Tres amigos de Jhamel viajaron ayer para recuperar a Vampiro. Después de una larga jornada, anoche Vampiro llegó hasta su casa, donde unos familiares de Jhamel lo cuidarán hasta que su dueña vuelva para llevárselo hasta Chile.
UN VERDADERO MILAGRO
“Nunca perdimos las esperanzas. Cada cierto tiempo mandábamos a familiares hasta Llavini para que sigan buscando a Vampiro”, comenta Jhamel con tono emocionado.
“Mis tres hermanas y mi mamá tenemos una conexión con él, sabíamos que estaba vivo y nos soñábamos mucho con mi gatito”, añade.
A pesar de que Vampiro se encuentra mucho más delgado, no ha perdido el buen ánimo y el apetito. Ahora lo llevarán al veterinario para que le realice una evaluación y le dé un tratamiento en caso necesario.
A tiempo de agradecer a todas las personas que la ayudaron, en especial a la señora que lo encontró y cuidó, Jhamel mandó un mensaje a quienes, en este momento, tienen a una mascota perdida: “el poder del amor es fuerte. No se rindan, todavía pueden tenerlas de vuelta en su hogar” || Opinión.
