Jhasmani Torrico, conocido como el “abogado torturador”, abandonó el penal de San Sebastián, donde cumplía una condena de seis años de privación de libertad. A mediados de junio, el jurista recibió la detención domiciliaria, por lo que el Juzgado de Quillacollo dio cumplimiento el miércoles al beneficio.
“A partir de ayer está cumpliendo detención domiciliaria, con custodio policial y las restricciones fijadas”, indicó a Opinión el gobernador del recinto penitenciario, Cristhian Arce.
El abogado fue procesado y sentenciado en 2021 por el secuestro y las lesiones que le causó al mecánico Juan Antonio Cuéllar.
Torrico fue trasladado ayer a una vivienda de la zona de Sumunpaya, en Colcapirhua, donde es custodiado por un efectivo policial que será relevado cada 24 horas.
En enero de 2019 a través de una serie de videos, se conoció que el abogado torturaba a litigantes para resolver demandas de deudas.
En ese entonces Cuéllar denunció que esos métodos del abogado se practicaban desde 2017 y se declaró víctima./P7
